El fin de curso ya ha llegado y pronto caerán en el olvido estos últimos días de especial estrés por estar repletos de preparativos, festivales, recados, exámenes, fiestas de fin de curso, merendolas… que llevan de cabeza a los niños/as, pero especialmente a sus progenitores.
Y con el fin de curso, llegan también las notas finales, que dan a los niños y niñas un resultado numérico de sus estudios y sus esfuerzos durante los últimos 9 meses. En muchas ocasiones, a los familiares les gusta tener un detalle con los niños como un premio por sus buenas notas, o incluso prometérselo días antes para que tengan un aliciente para estudiar más.
Sin embargo, hay quien considera que estudiar es su obligación por lo que no creen necesario este tipo de detalles. Queremos conocer vuestra opinión: ¿sois partidarios de los regalos de buenas notas para los niños/as? A mi mis padres (y algunos años también mis abuelos) sí que solían darme algún regalo, e incluso cuando era más mayor pedía yo unos días antes lo que iba a querer. Y yo era muy empollona responsable y estudiosa, no necesitaba ningún aliciente extra para saber que tenía que estudiar, pero sí que me gustaba saber que recibiría un regalo. Al final, era para mi un premio al trabajo bien hecho, una forma de darme la enhorabuena y de decirme que lo estaba haciendo muy bien. Insisto en que yo sabía que estudiar era mi obligación, pero saber que tendría un regalito al acabar el curso me aportaba motivación extra. A fin de cuentas, ¿qué adulto rechaza una paga extra o una prima si supera los objetivos o consigue algo especialmente importante en su trabajo?
Los regalos de buenas notas que recibí fueron muy diversos: un walkman, un reloj Casio, un discman, una colchoneta de playa con forma de dinosaurio… La verdad es que en mi caso, como Navidad y mi cumpleaños están muy cerca y luego ya no tenía más motivos para recibir regalos hasta las siguientes navidades, en junio siempre tenía alguna idea de algo que quería y así no tener que esperar de nuevo a diciembre.
Estoy segura de que si por aquel entonces hubiera existido la cápsula del tiempo Peque Retrobox la habría pedido y me habría encantado como regalo de buenas notas. En verano siempre me gustaba hacer los típicos cuadernos de vacaciones, del estilo “vacaciones Santillana”, escribir diarios y cartas, buscar “proyectos especiales” por lo que sin duda me hubiera emocionado al recibir una Peque Retrobox.
¿Qué es una Peque Retrobox?
La Peque Retrobox es una cápsula del tiempo para niños y niñas. Personalizada con su nombre y fecha de nacimiento o de cumple, cuenta con varias libretas y diarios que los niños/as pueden rellenar para reflejar sus gustos, sus ideas, sus primeros recuerdos, sus imaginaciones sobre el futuro… y también cuenta con un par de huecos reservados para que guarden algunos de sus pequeños tesoros. Una vez hayan completado todo el contenido, tendrán que cerrarla con la pegatina que se incluye, escribir una fecha del futuro para volver a abrirla y esconderla en un lugar seguro durante mucho tiempo, hasta que sean adultos. Así, el día que vuelvan a abrirla se encontrarán con una caja repleta de recuerdos de toda su infancia y se divertirán leyendo las divertidas respuestas que dieron a las preguntas del diario.
¿Por qué es un buen regalo de buenas notas para niños y niñas?
La Peque Retrobox es un objeto lleno de magia que cada niño/a que la reciba disfrutará al rellenarla, y volverá a disfrutarla en el futuro cuando la abra de mayor. Por esto creo que es un regalo perfecto para cualquier ocasión. Sin embargo, considero que el verano es un momento muy especial para rellenarla: los niños tienen mucho más tiempo libre que durante el curso, por lo que les resultará más sencillo encontrar los momentos en los que rellenarla. Incluso si tienen días más “aburridos” (que deban pasar en casa sin ningún plan especial) les supondrá un plan muy especial para esos días.
Además, en verano siempre se suelen realizar actividades más diferentes y divertidas, por lo que los niños/as tendrán más ideas de cosas que pueden contar en el diario y más fotografías diferentes para el álbum de fotos. Y por último, también suelen ser fechas en las que ven a más familiares que durante el curso, como personas que viven lejos, en el pueblo o en el lugar de veraneo, por lo que todas ellas podrán aprovechar a dejarle un mensaje para el futuro en su libro de dedicatorias.
¿Cuál es el contenido de la Peque Retrobox?
El contenido completo de la cápsula del tiempo para niños y niñas Peque Retrobox es el siguiente:
- Una caja metálica personalizada con el nombre y la fecha de nacimiento del niño o niña.
- Un diario guiado con distintos apartados, títulos, preguntas, propuestas… que los niños han de rellenar para contar cómo son, qué les gusta, qué saben de cuando eran más pequeños, cómo son su familia y sus amigos, cómo imaginan el futuro, etc.
- Una libreta de mensajes en la que todos sus amigos y familiares pueden escribirle una dedicatoria, que el niño o niña leera en el futuro, cuando reabra esta cápsula del tiempo.
- Un álbum de fotos en el que puede colocar las fotografías que quiera: con las personas más importantes para él o ella, en sus lugares favoritos, haciendo sus actividades preferidas o, en caso de rellenarla durante el verano, también de sus vacaciones.
- Un cuaderno que relata todo lo que ocurrió en el año de su nacimiento. ¡Seguro que le encanta leerlo de mayor!
- Un tarjetón en el que anotar la fecha de cierre de la cápsula y quién le ha ayudado a prepararla.
- Una pegatina con la que precintar la Retrobox e indicar la fecha deseada de apertura.